1. ¿Tu lavadora suena como si fuera a despegar?
Golpeteos, crujidos o zumbidos fuertes son señales claras de que algo no anda bien. Puede tratarse de un desequilibrio, cojinetes dañados, o piezas sueltas
Consejo Good Service: Evita seguir usándola si escuchas estos ruidos. Puede empeorar el daño.

2. Fugas de agua durante el lavado
Una fuga es una señal evidente de que algo no está funcionando como debe. Las causas pueden ir desde una manguera suelta hasta una bomba de agua deteriorada o empaques dañados.
Actúa pronto: Las fugas pueden dañar el piso y componentes internos del equipo.

3. No centrifuga correctamente
Si al finalizar el ciclo la ropa sigue empapada, puede haber un problema en el motor, correa, o en el sistema de drenaje. También puede ser una falla en la tarjeta electrónica.
No ignores este síntoma: Además de afectar el secado, puede derivar en daños mayores.

4. Olores desagradables o moho
El mal olor puede ser señal de acumulación de residuos, bacterias o humedad en lugares como el tambor o la gaveta del detergente.
Consejo Good Service: Un mantenimiento preventivo elimina estos residuos y mejora el rendimiento.

5. No enciende o se apaga sola
Cuando la lavadora no responde al encenderla o se apaga en medio del ciclo, puede tratarse de una falla eléctrica, problema con la tarjeta, o una sobrecarga interna.
No intentes forzarla: Un diagnóstico profesional evitará daños costosos.

¿La solución? Un mantenimiento a tiempo. Un Good Service te ofrecemos mantenimiento preventivo y correctivo para todo tipo de lavadoras y marcas. Alargar la vida útil de tu equipo es más fácil (y económico) que reemplazarlo.

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