Neveras y congeladores
¿Tu nevera no enfría bien? Estos podrían ser los motivos
Una nevera que no enfría correctamente puede ser una señal clara de que algo dentro del sistema está fallando. Este tipo de problema debe atenderse lo antes posible para evitar la pérdida de alimentos y daños mayores. Estas son algunas causas comunes:
Fuga o falta de gas refrigerante: El gas refrigerante es el encargado de absorber el calor del interior de la nevera. Si hay una fuga o el nivel está bajo, el sistema pierde su capacidad de enfriar correctamente. Es importante no recargar el gas sin antes hacer una prueba de fugas.
Suciedad en el condensador: El condensador libera el calor extraído del interior de la nevera. Si sus bobinas están cubiertas de polvo o grasa, se reduce la eficiencia del intercambio térmico, provocando un funcionamiento deficiente.
Falla en el termostato: El termostato regula el encendido del compresor. Si está dañado, la nevera puede dejar de enfriar porque no se activa el sistema cuando debería.
Obstrucción en ductos o escarcha acumulada: En los modelos frost y no frost, la acumulación de hielo puede bloquear la circulación del aire frío, haciendo que el interior se mantenga tibio aunque el compresor esté funcionando.
Tips para alargar la vida útil de tu nevera
Cuidar tu nevera no solo mejora su rendimiento, también prolonga su vida útil y ahorra energía:
Limpia las bobinas del condensador cada 3 a 6 meses: Usa una brocha suave o una aspiradora para eliminar el polvo acumulado.
Ubícala con espacio libre detrás y a los lados: Esto permite una mejor circulación del aire caliente que sale del condensador.
No introduzcas alimentos calientes: Espera a que enfríen a temperatura ambiente. Los alimentos calientes hacen que el compresor trabaje más de lo necesario.
Verifica que las puertas cierren bien: Revisa los empaques y asegúrate de que no haya fugas de aire. Si los empaques están duros o agrietados, deben reemplazarse.
Hazle mantenimiento preventivo cada año: Un técnico puede revisar presión del gas, estado del motor, termostato, drenajes y sistema eléctrico.
¿CADA CUÁNTO HACERLE MANTENIMIENTO AL SISTEMA DE GAS REFRIGERANTE?
Aunque no es necesario recargar el gas refrigerante de forma rutinaria, sí es recomendable revisar el sistema al menos cada 12 a 18 meses.
Esta revisión incluye una medición de presión, chequeo del nivel de gas y detección de fugas. En caso de encontrar fugas, se debe reparar primero y luego recargar con la cantidad exacta que el sistema requiere.